TRISTE
Llevó a su perro enfermo para ser sacrificado y un año después lo encuentra vivo en un anuncio de adopción en Facebook
Un veterinario le dijo a la mujer que su perro padecía un problema neurológico y que lo mejor sería practicarle la eutanasia. Sin embargo, el lugar al que llevó a sacrificarlo lo mantuvo con vida y un año después lo puso en adopción.
Publicidad
Una mujer se sorprendió al descubrir que el perro enfermo que llevó para sacrificarlo estaba de regreso en el refugio y estaba en adopción un año después. Kristie Pereira, de 32 años, quedó desconsolada cuando le dijeron que lo más humano que podía hacer por su amada mascota Beau era sacrificarlo.
Agotada y sin opciones después de consultar dos clínicas veterinarias, Kristie Pereira tomó la desgarradora decisión el año pasado de llevar a su cachorro desesperadamente enfermo a un refugio en Maryland para que le practicaran la eutanasia.
"Tengo muchas preguntas, pero ante todo quiero que vuelva conmigo", dijo Pereira a The Associated Press.
Pereira, que ahora vive en San Antonio, dijo que estaba trabajando desde su casa en Maryland cuando pagó 450 dólares a finales de 2022 para adoptar una mezcla de sabueso de dos meses de una perrera local llamada Lost Dog & Cat Rescue Foundation.
Llamó al cachorro Beau y rápidamente los dos se volvieron inseparables. Beau se acurrucaba junto a ella mientras trabajaba, dormía en su cama y la acompañaba cuando Pereira salía de la casa. Pero al poco tiempo de estar juntos se dio cuenta de que algo raro le pasaba a su cachorro.
Un veterinario concluyó que lo más probable es que el problema fuera neurológico. Los análisis de sangre mostraron que el perro podría tener un problema hepático, por lo que enviaron a Pereira a casa con enzimas hepáticas y le dijeron que "vería una mejora bastante rápida" si el problema era el hígado pero la condición del perro no hizo más que empeorar.
El veterinario del perro, el veterinario principal de la clínica y un veterinario de la sala de emergencias para animales coincidieron en que la incapacidad del perro para controlar sus intestinos y levantar sus patas traseras indicaba un problema neurológico grave, dijo Pereira.
El costo de realizar una serie de pruebas para averiguarlo era de alrededor de 12.000 dólares. A pesar de lo elevado de la factura Pereira dijo que habría encontrado una manera de pagarla si eso hubiera salvado a Beau.
En cambio, le dijeron que hab ía "muy pocas posibilidades de encontrar lo que está mal. E incluso si lo hacemos, existe una posibilidad aún menor de que sea algo que podamos solucionar".
Fue entonces cuando comenzaron a sugerir que podría ser más humano sacrificar al cachorro. Ella inicialmente no quería considerar esa opción y aguatnó un mes más antes de tomar la decisión.
Durante todo el proceso, dijo Pereira, estuvo consultando al personal de Lost Dog & Cat Rescue. "Honestamente, quiero decir, después de hablar con ellos fue cuando realmente sentí, ya sabes, que iba a hacer lo correcto al sacrificarlo", dijo Pereira.
Pereira asegura que llevó a Beau a Servicios para Animales del Condado de Montgomery en Derwood, Maryland, a fines de marzo de 2023 y pagó $15 para que le aplicaran la eutanasia. Le dijeron que la política del refugio no permite que las personas se queden con sus mascotas mientras las sacrifican.
Fue durante una visita para ver a su madre en Maryland la semana pasada que la curiosidad la llevó otra vez la web de la asociaciñon para ver los perros en adopción y vio la foto de Beau. El cachorro era más grande pero tenía las mismas marcas y llevaba el nombre que le había dado el rescate antes de adoptarlo: Amos Hart.
Las llamadas al refugio confirmaron que su perro no había sido sacrificado después de que los veterinarios pensaron que no era necesario. En cambio, el refugio llamó a Lost Dog & Cat Rescue y les devolvió el cachorro.
El refugio de animales publicó en una declaración escrita, brindando un cronograma extenso que muestra que sus veterinarios no encontraron problemas neurológicos en el perro. Después de pruebas que diagnosticaron un problema hepático y una cirugía de 7.000 dólares (pagada a través de una campaña de GoFundMe), el perro fue declarado sano.
Ahora Kristie Pereira está haciendo todo lo posible por intentar recuperar al perro pero desde el refugio lamentan la situación de Pereira, se excusan en que están obligados por contrato a devolver a la protectora aquellos animales que hayan sido entregados y que no pueden hacer nada más al respecto.
Publicidad