Las amenazas homófobas de unos streamers en Twitch: “¿Cuántos homosexuales te bajarías?”

Entre los torneos de Pokémon, Marbella Vice y TortillaLand, a veces no vemos lo que sucede en los bajos fondos de Twitch. La plataforma cobijó la entrevista de unos jóvenes a otro en la que se sucedieron las amenazas y se formuló una pregunta del todo injustificable. Los comentarios de odio tuvieron como blanco a un tuitero donostiarra.

Nos sorprende que el programa lo hicieran desde una cocina y no desde una cueva y en taparrabos, pero si la pregunta estrella ya es de por sí tremenda: “¿Cuántos homosexuales crees que te bajas?”, las respuestas lo son todavía más: “Imagínate metiéndole un puñetazo”. La charla no era propia de unos sujetos nacidos en este siglo.

Por si fuera poco, cuando el entrevistado preguntó: “¿Qué es bajarse?”, los conductores del directo le contestaron: “Los matas, con tus propias manos”. La conversación entre los cuatro personajes ha caído en Twitter como un jarro de agua fría y en la semana del Orgullo, una prueba más de lo necesarias que son las reivindicaciones –ahora y siempre–.

Los machos cabríos, ni cortos ni perezosos, se atrevieron a pronunciar el nombre de una persona por si no fuera suficiente con sus explícitas palabras. El aludido, Julbit, decidió responderles en Twitter y no callarse ante las calumnias de los streamers: “aprovechando q estamos celebrando el Orgullo no me puedo mantener callado ante lo que me a pasado hoy”.

Lo de esparcir hate anónimamente en redes no es nada nuevo, y aunque igual de repulsivo, es alarmante que estos jóvenes –recalcamos esto último–, se atrevan a difamar a otra persona en directo e incluso lleguen a las intimidaciones. No nos queremos imaginar qué no harán en privado si no han tenido vergüenza alguna en sacar a la luz el stream.

Los pubescentes se han creído los reyes del mundo copiando con muy poca gracia el formato de ‘Yo, Interneto’. La pregunta, reformulada con un gusto pésimo, la suelen hacer en el programa de Orslok, Cheeto y Dario Eme Hache. Obviamente, en otro tono y sin referirse en ningún momento a personas del colectivo.

Los valientes pícaros ya han sido desterrados de Twitch y pueden volver a pintar paredes. El salto tecnológico ha sido demasiado para ellos y esperamos no verles en mucho tiempo. La retransmisión es buena muestra de lo que no se ve y sigue existiendo. Los valientes no fueron ellos, lo son las quejas públicas y descarnadas de Julbit en su perfil de Twitter.