Lo más esperado
Conciertos de Rosalía en Madrid y Barcelona: todo listo para el tra-trá
2019 todavía no se ha acabado en el mundo del espectáculo, y uno de los eventos más grandes se celebra este fin de semana. Rosalía se dejará querer con lleno absoluto en las gradas.
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Antes de Rosalía, la expresión “El mal querer” podía tener un significado entre triste y nostálgico, pero con su llegada a la escena ha sido un huracán imparable, siendo un sinónimo de alegría y espectáculo. Si 2018 fue el año del descubrimiento, 2019 ha sido la explosión completa de una artista que en su corta carrera ya ha llegado a la categoría de leyenda.
Y la mejor manera de despedirse frente a su público este año es a través de los tres conciertos que dará este finde, dos en Barcelona y uno en Madrid. Eventos que prometen ser inolvidables, y que agotaron las entradas poco tiempo después de ponerse a la venta.
‘A Palé’, ‘Con altura’ y ‘Malamente’, entre otros temazos, petarán los oídos de los afortunados que el 7 y 8 de diciembre puedan ir al Palau Sant Jordi de la ciudad condal, mientras que el recinto elegido para el concierto en la capital es el WiZink Center, en esa ocasión el día 10.
Como telonero actuará Polito, el bailaor favorito de la artista, que será el encargado de calentar los ánimos flamencos de los asistentes. No es ni mucho menos un desconocido, ya que ha actuado como el show de presentación para estrellas internacionales como Beyoncé o Madonna.
Los tres conciertos comienzan a las 21:00, aunque pensando en la gran cantidad de gente que acudirá las puertas estarán abiertas dos horas y media antes. A las 20:00 empezará la actuación de Polito, pero si tienes entradas no lo dejes para el último momento, que seguro que hay aglomeraciones.
Rosalía se ha pasado los últimos días dando conciertos en París y Londres, además de subiendo fotos a redes donde hemos podido ver su atrevido y siempre original atuendo. Posó para su fotógrafo en un céntrico barrio de la capital británica, en lo que parece ser una de las calles aledañas a Leicester Square. Si fue en esa zona, llena de gente a la última, su ropa no llamaría mucho la atención y quizá los londinenses no se pararon dos veces a mirarla. No sabían a quién tenían al lado.
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