El homenaje de Drag Race España a José Perez Ocaña: ¿quién fue la Reina de las Ramblas?

Las expectativas de Drag Race España, temporada 2, estaban por las nubes después de un incontestable éxito el año pasado. El plantel inicial deslumbró con los estilismos extremos a los que nos tiene acostumbrado el -según los premios Ídolo- mejor proyecto audiovisual de 2021, y 'La nueva promoción' no decepcionó. Lo tienes completoaquí mismo.

Igual que sucedió en la primera temporada, en cada capítulo se tiene que demostrar la capacidad de adaptación de las aspirantes con maxi retos, uno de los cuales consistió en un reto geográfico: un look en homenaje a "símbolos de las ciudades que las vieron nacer" y otro honrando a "reinas de su ciudad, un paisano o paisana que sea especial para ellas".

Entre monumentos y personas populares de todas las regiones, fue Marina y su veneración a José Pérez Ocaña la que se llevó el entusiasmo de las redes. Más conocido como 'Ocaña, la Reina de las Ramblas', fue una figura clave en la escena artística LGTBI española y más concretamente catalana.

Sevillano de nacimiento, fue Barcelona la ciudad donde desarrolló su carrera inclasificable desde que llegó a los 24 años, allá por 1971. El mundo era otro, y sus primeras intervenciones artísticas son dentro del género naíf, que por si no lo sabes representan la realidad con una ingenua -en el buen sentido- sensibilidad infantil.

Los colores vivos, la simplicidad de las formas y el rechazo a los tecnicismos académico le valieron para popularizarse en aquellos años de transición, abriendo hueco a las performances cuando casi nadie de la época (siempre hay que mencionar la excepción de Salvador Dalí) sabía qué era eso.

La pintura fue una excusa perfecta para poco a poco abrirse paso en la escena LGTBI, convirtiéndose con el paso del tiempo en un icono gay de la capital catalana. De hecho, hace poco fue objeto de otro homenaje en forma de obra teatral titulada simplemente 'Ocaña, Reina de las Ramblas', que repasaba su trayectoria e influencias en el sector. En 2020 se llevó varios premios como mejor espectáculo teatral de la temporada.

Ya como icono y activista de referencia en unos tiempos donde solo mostrarse como homosexual era un símbolo de valentía formidable, regresó a su natal Cantillana para hacer un pasacalles, disfrazado de sol. La mala suerte hizo que el material con el que estaba hecho se incendiara accidentalmente, provocándole quemaduras que acabaron con su vida.

La tragedia hizo de Ocaña un símbolo todavía más grande, y 39 años después de aquello Drag Race España no ha querido dejar pasar la oportunidad de resaltar su figura como el artista transgresor y admirable que ha inspirado a muchos otros. Seguro que a él le hubiera encantado ser recordado de esa manera, y más en un programa quizá impensable en aquella época.

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