Aumenta aún más la preocupación por Justin Bieber tras su impactante aparición en Coachella

Coachella suele ser sinónimo de celebración, música y desparpajo, y la aparición de celebridades es parte del espectáculo. Sin embargo, este año, Justin Bieber no acaparó titulares por una actuación sorpresa ni por su estilismo. Lo hizo, en cambio, por su estado anímico. La superestrella canadiense fue grabada durante el festival con un comportamiento que muchos califican como preocupante.

Lejos del glamour habitual, Bieber fue visto caminando solo, con la mirada baja, ropa oversize y una toalla roja en la cabeza. En varios vídeos difundidos en redes, aparece moviéndose de forma errática al ritmo de su propia música, con el torso desnudo y fumando lo que parecía ser un porro. Lo que para algunos fue una imagen excéntrica, para muchos otros fue una señal de alarma.

"¿Está bien Justin?", "Parece totalmente desconectado", "Necesita ayuda ya", fueron algunos de los mensajes que se multiplicaron en X e Instagram. La preocupación crece, especialmente por su historial: el artista ha hablado abiertamente en el pasado sobre sus problemas de ansiedad, depresión y episodios de agotamiento físico y mental.

La ausencia de Hailey Bieber en este segundo fin de semana del festival también ha añadido incertidumbre. Sin compañía visible, y en medio de un ambiente frenético, el canadiense ha preocupado a sus fans más que nunca. No es la primera vez que su actitud genera debate, pero en esta ocasión el eco mediático ha sido mayor por el contexto emocional que arrastra desde hace meses.

Sus fans, muchos de ellos testigos de su crecimiento desde los inicios en YouTube, han lanzado un mensaje claro: quieren verle bien, aunque eso signifique alejarse temporalmente de los focos. Porque lo que está en juego, dicen, no es su carrera, sino su salud.

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