Internet está furioso con Spotify y no tiene que ver con la música ni los royalties a los artistas

Spotify enfrenta constantes críticas, y no solo por su modelo de negocio en la industria musical. Recientemente, ha recibido una avalancha de peticiones para que elimine los podcasts de Andrew Tate, un polémico influencer conocido por sus posturas misóginas. La plataforma ya ha eliminado uno de sus programas debido a su contenido, considerado inaceptable por cruzar todos los límites.

Como el servicio de streaming más grande del mundo, Spotify ha sido criticado históricamente por la baja remuneración a los artistas. Sin embargo, su último informe indica que la mitad de sus royalties van a parar a músicos independientes. Más allá de este debate, la compañía también ha sido señalada por alojar contenidos polémicos, como el podcast de Joe Rogan o por haber organizado un evento en el marco de la investidura de Donald Trump.

Ahora, Spotify vuelve a estar en el ojo del huracán tras revelarse que alberga numerosos podcasts de Andrew Tate. Tate ha construido una lucrativa carrera promoviendo discursos machistas y misóginos. A pesar de haber monetizado su contenido durante años, la plataforma decidió eliminar uno de sus programas más recientes: un curso titulado "Pimping Hoes Degree", donde enseñaba estrategias de manipulación y control sobre mujeres.

Según 404 Media, la decisión de eliminar el programa se tomó después de que empleados de la compañía expresaran su descontento en conversaciones internas. En mensajes filtrados de Slack, un trabajador escribió con ironía: "¡Feliz Mes de la Historia de la Mujer a todos!", mientras otro calificaba como "vil" que Spotify siguiera obteniendo ganancias del contenido de Tate.

La reacción de los usuarios también ha sido contundente. "Cancelé mi suscripción a Spotify Premium el domingo por la noche", escribió un exusuario en Reddit. "Cuando una empresa permite que se difundan programas como este, que son básicamente manuales para la coerción y la manipulación sexual, no puedo seguir dándoles mi dinero". Además, una petición en Change.org exigiendo la retirada del contenido ha superado las 55.000 firmas.

Durante años, Andrew Tate ha sido una de las voces más visibles de la misoginia en internet, alentando a los jóvenes a tratar a las mujeres como objetos desechables. Ha amasado una fortuna con distintos negocios, entre ellos un servicio de cámaras web de contenido explícito, que es la base de un proceso judicial en Rumanía. Actualmente, Tate y su hermano Tristan, que se encuentran en Estados Unidos, enfrentan acusaciones de trata de personas y conducta sexual inapropiada, aunque aún no han sido condenados.

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