TOCA APOQUINAR
¿Por qué son tan caras las entradas de los conciertos en España?
La reciente venta de entradas para The Eras Tour de Taylor Swift en Madrid ha despertado de nuevo el debate sobre la subida de los precios de las entradas para los conciertos en España. Muchos se han preguntado por qué, con una RPC tan baja, este país tiene las entradas más caras de Europa.
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Ir a un concierto de tu artista favorito puede ser una experiencia inolvidable, y algunos de los shows que se preparan son espectáculos de un elevadísimo presupuesto. Sabiendo que esto es así, muchos están dispuestos a soltar grandes cantidades de dinero con tal de asegurarse de que verán el concierto desde un buen sitio, y esto es algo que los organizadores de estos eventos conocen muy bien. Los fans de Taylor Swift se llevaron ayer una desagradable sorpresa al comprobar que las entradas para su concierto en Madrid eran las más caras de todos los shows que va a dar en Europa, con diferencia. Esto ha despertado un nuevo debate sobre los precios de las entradas y la razón por la que estos son tan elevados en España.
Muchos han apuntado a la monopolización de la venta de entradas como la causante de que los precios hayan subido tanto. Las compras on-line han facilitado que cualquiera, desde cualquier rincón del país, quiera comprar pases para conciertos muy demandados, y eso ha llevado a los artistas a tener que firmar acuerdos de exclusividad con ciertos portales en concreto, para poder controlar más la venta y que no se dupliquen entradas por error. Que varios sites tengan que comunicarse en directo para informarse a cada milisegundo de qué entradas se han vendido es una tarea casi imposible; acabarían vendiéndose pases de más.
Los espacios cada vez más ambiciosos (como el Santiago Bernabéu, en el caso de Taylor Swift) son también parte de la causa de que los precios de muchos conciertos sean cada vez más altos. Además, la logística y el traslado de equipos personales y materiales son una de las principales fuentes de gastos para un artista: si se celebra un solo concierto en un país, como es el caso de España y Taylor Swift, estos gastos se amortizan mucho menos que en una tirada de seis shows en una sola ciudad.
Por supuesto, no es del todo justo que los fans tengan que ser quienes carguen con todos estos gastos extra. Pero, observando la demanda que existe y los 'sold outs' prácticamente asegurados, es poco probable que esta tendencia ascendente de los precios de las entradas para los conciertos cambie en los próximos años.
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