PENETRACIONES, FELACIONES O TRÍOS EN DIRECTO
Los amantes del porno graban sexo en directo con sus móviles en el Salón Erótico de Madrid
La música techno atronadora revienta contra el altísimo techo del Pabellón de Cristal de la madrileña Casa de Campo. Alrededor de las escenas de sexo en vivo los pornófilos (de toda edad, raza, género y condición) se arremolinan tratando de grabar cada detalle con sus móviles. Más que un campo de nabos, es un campo de 'smartphones', como girasoles del sexo.
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La industria del porno en España va cogiendo relevancia y desarrollando un 'star system' propio. En el primer Salón Erótico de Madrid se puede conocer parte de esa industria, ver follar a gente en directo o meter el pene en un 'glory hole'. También conocer otras iniciativas satelitales relacionadas con el arte, el sexo tántrico o la educación sexual.
Dos mujeres practican sexo con un hombre: una se sienta sobre su cara y otra sobre su miembro erecto. Dos hombres practican sexo con una mujer: ella se coloca a cuatro patas y, mientras uno le penetra, ella le practica una felación al otro. Un hombre se la chupa a otro hombre.
Yo pensaba que iba a sufrir grandes excitaciones e incómodas erecciones mientras veía estos shows, en realidad, dado el ambiente frío y calculador, me provocaron más curiosidad que calentura.
En el Salón Erótico de Madrid, que se celebró por primera vez en la capital este fin de semana (tiene larga tradición en Barcelona y se llevan a cabo en otras ciudades, sobre todo por Levante), se puede ver en directo cosas que la gente suele hacer en la intimidad (si es que la gente hace muchos tríos) pero me dio más la sensación de ver sexo animal en el zoológico: pelín lejos, rodeado de curiosos, con elevados niveles de ruido.
"Acostumbrada a ver primeros planos de porno, verlo tan de lejos me deja bastante fría", dice una espectadora. En un cartel pintado a mano se lee: "Bukkake gratis, apuntarse aquí". En otro, más profesional, ofrecen "mamadas gratis": la página amateur Fakings quiere batir el récord de 'glory hole' (uno mete el pene por un agujero misterioso y alguien misterioso lo lame al otro lado).
En un stand ofrecen probar masajes eróticos sin complejos. Regalan ejemplares de la revista 'Clima', casi un artículo 'vintage', de las pocas que quedan en formato impreso, para que los analfabetos digitales dejen pringosas las páginas. Y así todo.
El Salón Erótico está muy bien para poner cara a las personas a las que les va esto del porno, que son muchas: ya saben, la enorme parte sumergida del iceberg que es Internet consiste en pornografía.
Se habla poco de ella, a veces surge de pasada en un conversación, la gente conoce los nombres de algunas páginas web, de algunas actrices y actores, pero está mucho menos presente en el debate público que el fútbol, o la política, y probablemente se consuma más.
Aquí se ve que viene gente de todo tipo, no solo el esperado pajillero adolescente (que también): parejas de mediana edad practicantes de 'swinging', chavalas jóvenes, gente con diversidad funcional, peña gótica, personal 'random' como Pepe el de Marketing.
Algunos se pasean desnudos o semidesnudos por el recinto, con patines o correas de cuero y tachuelas. Por ejemplo, la actriz Carolina Abril, sobre unos grandes tacones, saca a pasear a su perro, que no es otra cosa que un tío hipermusculado, con una máscara de cuero, que camina a cuatro patas.
También se ve en el Salón cómo se está formando una industria patria del porno (la gran industria madre se radica en California, como tantas otras) con productoras como Actrices del Porno, Leche69, CumLouder o Fakings, algunas de ellas presentes en el Salón.
"Lo que hacemos en la industria del porno no es nada más que lo que la gente quiere ver, así va evolucionando", dice el célebre actor Nacho Vidal, "cada vez se demandan cosas más retorcidas y fuertes. Con Internet la gente busca su fetiche, cada vez más sorprendente, cosas muy locas".
También señala el crecimiento en España del asunto: "Hace veinte años se rodaban dos películas al año, ahora se ruedan dos al día. Tenemos actores que son número uno internacionalmente y muchas industrias extranjeras que vienen a trabajar a España. Este país se está convirtiendo en una potencia".
Entre los nombres que forman ese 'star system' patrio, además del propio Vidal, están Marco Banderas, Aris Dark, Apolonia Lapiedra, Amarna Miller, Julia Roca, Leyla Black o el muy particular Jordi, apodado el Niño Polla. Vidal lanzó en 2011 un perfume cuyo frasco era un pene de 25 centímetros, réplica del suyo propio.
"Yo he venido aquí a disfrutar, a meter mano y que me la metan", concluye, "esto es un parque temático de la diversión y la sexualidad".
Alrededor de las grandes productoras surgen otras inopinadas iniciativas. Por ejemplo, hay espacio para el arte, como el de la pintora granadina Maribel Andrés vestida de cuero negro, que cultiva el género erótico y vende su obra en un stand rodeado de tiendas de parafernalia sadomaso y tatuajes.
Algunos cuadros llegan a los 600 euros. "Aparte de los espectáculos pornográficos, la feria quería tener stands de pintura y fotografía", cuenta, "yo iba a venir como público, pero al final vine como expositora". Antes Andrés hacía un arte más, digamos, convencional, pero la demanda le hizo pasarse en los últimos años a este género más subido de tono.
"Es la primera vez que vengo a un evento de este tipo, es más divertido que el entorno habitual de las salas exposiciones, a ver qué tal se da".
"Nosotros somos una productora de películas artísticas y eróticas basadas en el tantra", cuenta Sabari en el stand de Arte Extasia, productora con base en Hungría. Quieren compartir con el público "una nueva forma de vivir la experiencia amorosa, hacer el acto sexual sagrado, llegar a otros niveles energéticos de vibración".
Según la filosofía tántrica el hombre no debe eyacular y la mujer no debe experimentar orgasmos explosivos, así conservan su energía sexual mediante "orgasmos implosivos". La energía sexual, teóricamente, se convierte en otras energías como la mental o afectiva. "Es una nueva forma de vivir la sexualidad a través del Eros divino y el amor sagrado".
En una industria muchas veces tachada de machista (gran parte lo es, aunque también hay iniciativas de porno feminista) aquí hacen rituales de adoración a la mujer.
Sobre porno y feminismo también se habla en la zona de conferencias, el Aula de Sexo, además de otros asuntos como felaciones diversas, masterclass de punto g, taller de cunnilinguis o de squirting o sobre cómo disfrutar del sexo anal.
Vamos, todo lo que usted quería saber sobre el sexo y nunca se había atrevido a preguntar. En la iniciativa pornoeducativo.com tratan de llevar a cabo una educación sexual sin manzanas con manzanas, niños en cigueña o semillitas en vientre.
"Queremos romper barreras y tabús", dice Adrián Pérez Martínez, director de comunicación, "empezar a enseñar de forma explícita. Nos hemos cansado de ver cómo enseñan a los chavales a poner un preservativo en una fruta o en una hortaliza. Al pene, por su nombre".
Al regresar a la civilización desde la abrasadora Casa de Campo un amigo me preguntó: "¿Pero huele mal?, ¿te puedo dar la mano?".
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