¡Cuidado con el bótox! Una tiktoker muestra cómo ha cambiado su sonrisa después de un error

Una joven de Florida (Estados Unidos) se ha convertido en viral con su testimonio en el que cuenta cómo le ha cambiado su sonrisa y su expresión facial por culpa del bótox. Montanna Morris se ha animado a compartir su mala experiencia con esta toxina después de ver cómo se había estropeado el ojo de Whitney Buha, que también se convirtió en viral.

Montanna Morris decidió inyectarse Dysport (una marca de toxina botulínica) para poder arreglar sus problemas musculares y disminuir el dolor que le provoca la articulación temporomandibular: "Mi médico me había recetado relajantes musculares antes, pero eso no ayudó, así que me recomendó el Bótox como una opción antes de una cirugía mayor de la mandíbula. El inyector me dijo que tendría los resultados definitivos en una o dos semanas, pero mi cara ya estaba congelada en cuatro días, así que sabía que iba a ser malo", cuenta en el tiktok que se ha vuelto viral.

"El ancho de mi boca comenzó a acortarse. Cada vez podía ver menos mis dientes cuando sonreía", le ha explicado a Buzz Feed. "Luego mis hoyuelos desaparecieron casi por completo. Mi ATM está mejor - mi mandíbula se desbloqueó poco después del tratamiento y se bloquea mucho menos ahora, pero sorprendentemente tengo más dolor que antes. Debido a la parálisis, se me ha atrofiado bastante la musculatura, por lo que masticar ciertas cosas es más difícil que antes".

Morris se decantó por esta marca más barata, que requiere unas unidades de dosis diferentes al bótox, lo que pudo provocar la confusión de la persona que se lo realizó, además de en exceso, en el sitio equivocado.

"Aunque el bótox se emplea mucho para fines estéticos, lo cierto es que hace ya varios años que se viene utilizando también en Medicina, sobre todo para abordar problemas de origen neuromuscular y en algunas clínicas especializadas en fisioterapia. El especialista que lo aplique siempre debe ser un médico especializado en medicina estética, plástica o cirugía maxilofacial", nos ha explicado el experto al que hemos consultado, el doctor Jorge Ferrus, implantólogo y periodoncista de la clínica Ferrus & Bratos.

Según Ferrus, aplicar esta toxina botulínica para tratar alteraciones de la ATM "no soluciona el problema, simplemente ayuda a relajar químicamente el músculo. Por ello, el bótox se usa cuando el paciente experimenta un dolor muy agudo que, incluso, le impide abrir la boca con normalidad. Además, esta toxina se va diluyendo con el paso del tiempo, así que su efecto relajante puede durar alrededor de 3 a 6 meses en función de la dosis aplicada".

Montanna Morris se inyectó el bótox hace dos meses, por lo que recuperará su sonrisa cuando su efecto desaparezca sobre junio o julio.