La huella de carbono del Mundial 2030

La FIFA ha anunciado que el Mundial 2030 se celebrará en España, Portugal y Marruecos. Además es el Mundial centenario, se cumplen 100 años desde el primer Mundial Uruguay 1930 así que se jugará un partido inaugural en el país charrúa. También se jugarán otros dos partidos inaugurales en Argentina y Paraguay porque pillaban cerca. Si os habéis perdido y recapitulando, es más fácil repasar los países que NO son sede del Mundial que los que sí lo son.

Si vais a criticar a la FIFA, recordad que el último Mundial se lo vendieron a una dictadura salafista y se tuvo que celebrar en invierno porque en verano hace 50º, así que vamos mejorando. Quedan cosas por saber del Mundial, no han contado si los seis países anfitriones están directamente clasificados entre ellos y juegan un playoff de países anfitriones para ver que anfitrión lo juega. Tampoco si las sedes están cerradas o ahora mismo hay un agente de la FIFA vendiéndole a los saudís dos octavos de final a precio de ganga.

Es gracioso porque muy probablemente la FIFA lance alguna campaña para el evento incentivando a la gente a usar el patinete para frenar la emisión de CO2 pero ha elegido disputar un evento que de toda la vida se ha disputado en un país en seis países distintos de tres continentes. No va a haber una selección que pueda jugar un partido sin coger un avión antes. Hacen falta 8 siglos de todos los murcianos bebiendo en pajitas de papel, viajando en bici y comiendo tofu para compensar la huella de carbono del Mundial 2030.

Para el próximo Mundial la FIFA ya piensa en algo más espectacular como disputar la primera parte de un partido en Nueva York y la segunda en Londres. A lo mejor es que como es el Mundial 2030 ya no hace falta cumplir los objetivos de la Agenda 2030 y podemos quemar carbón a tope.

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