¿Qué hace que un torero no pueda hablar de su homosexualidad?
¿Puede un torero gay tener una carrera de éxito y llenar plazas?
El mundo de la tauromaquia sigue siendo un mundo teñido de homofobia algo que impide a muchos toreros y toreras dar un paso al frente y normalizar y visibilizar la diversidad que existe dentro de nuestra sociedad.
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Como periodista en mis años de carrera, pude conocer y hablar con algunos toreros homosexuales así como picadores que semana tras semana llenan plazas y son grandes referentes dentro del mundo del toro, ¿Qué hace que un torero no pueda hablar libremente de su sexualidad? El principal miedo que tienen es a la retirada de apoyo por parte de su propio equipo de trabajo y, posteriormente, el miedo a que los ganaderos y empresarios de las plazas de toros no quieran seguir contando con ellos.
Por eso decido ponerme en contacto con un ganadero muy importante de este país que hace pocas semanas estuvo presente en la corrida de San Isidro de Madrid: “Los ganaderos no opinamos sobre los toreros, igual de malo es salir en los programas de corazón que si alguien es homosexual. Me da igual la vida de los toreros, yo lo que quiero es cuando salen al ruedo luzcan lo máximo posible a mi ganadería”
Sobre si es un mundo teñido de homofobia, el ganadero opina que “antaño podría ser muy machista y homófobo, pero que, en pleno 2018, no puedo decir que exista discriminación o yo por lo menos no la tengo”.
Otro de los pilares del mundo de la tauromaquia son los empresarios de las plazas de toros, pieza fundamental con la que también he decidido hablar, como el ganadero, prefiere guardar su anonimato, pero sus declaraciones son reveladoras.
“Que un torero sea gay no tiene importancia siempre y cuando no venga acompañado de un escándalo que pueda perjudicar a la venta de entradas y abonos”
¿Qué significa para un empresario venir acompañado de un escándalo?: “Principalmente, que no hable de sus intimidades en medios de comunicación ni viva una vida promiscua, algo que considero no es beneficioso ni para mí como empresario ni para el apoderado ni para el propio torero”.
Resulta curioso que un torero heterosexual pueda vender su vida privada en revistas y programas de televisión y sea un reclamo para cerrar más plazas en su temporada y que para un torero homosexual su vida privada elevada a público sea considerado como “escándalo”.
Me queda una duda por resolver. ¿Contrataría a un torero abiertamente gay? El empresario responde: “Tendría que llegarme esa propuesta y valorarlo, a día de hoy creo que no sería un problema, pero tendría que estudiarlo con mi equipo cuando se presente la ocasión”.
Ante la falta de sinceridad delante de una conversación grabada por parte de los ganaderos así como del empresario de la plaza de toros, decido ponerme en contacto con el único torero que ha tenido gestos de acercamiento hacía el colectivo LGTB y que llegó a brindarme un toro en una corrida en Las Rozas tras sufrir agresiones homófobas.
Posada de Maravillas asegura: “Estoy encantado de dar mi apoyo incondicional al colectivo”. Sobre si sus declaraciones y acciones a favor de personas LGTBI le han perjudicado dice: “para nada, todo lo contrario. Muchos profesionales me han dado las gracias por decir lo que la mayoría pensamos”.
Si no existe ningún tipo de problema sobre la condición sexual de un torero porque nadie visibiliza esa realidad y da un paso al frente, o acaso ¿no hay toreros gay? “Yo, no conozco ningún torero homosexual”, asegura Posada de Maravillas quien además dice “No permitiría ningún caso de homofobia en el entorno en el que me rodeo”
Y ante el gran interrogante de nuestro artículo, ¿puede un torero gay tener una carrera de éxito y llenar plazas? Posada de Maravillas asegura: “Es cierto que todavía hay gente con mentalidad antigua, pero creo que no le perjudicaría. Pienso que se le admiraría y se le respetaría”.
No sólo contacte con el torero ya considerado “amigo del colectivo”, quise tener a otros toreros que se han negado a participar dentro de este artículo, llegándolo a considerar “absurdo”, “surrealista”. Sin embargo, lo más preocupante es la visión general que ante la falta de referentes que quieran dar el paso, por miedo a la afición taurina, no hay ningún torero gay ni lesbiana ya que si no habría salido.
Como decía al principio como periodista pude conocer que es una realidad que si existe, el mundo del toro si tiene personas homosexuales, pero no han querido tampoco participar ya que aseguran que “si España nos da la espalda, solo nos queda México y de aquellas corridas no se vive”, me quedo con la esperanza de que algún día den el paso.
Sobre todo si todos los testimonios recogidos aquí, muestran que no había ningún problema, que un torero que sea homosexual sería contratado igual y que llenaría plazas de igual manera así como que los compañeros lo apañarían, será cuestión de tiempo que alguien sea el primero de ponerse el traje de luces y realizar su mejor faena en esta ocasión no delante del toro si no de naturalización ante la sociedad. Pero para conseguir eso tendrás que asomarte al balcón.
¡Qué bien se ven los toros desde la barrera! Me dirán muchos que no dan el paso al frente, pero en nuestra sociedad lo que no se visibiliza no existe y lo que no se dice no se sabe, entre el público que muchas veces acude a las plazas de toros también hay personas homosexuales no lo hagáis por el miedo a la sociedad hacerlo por aquellos que os apoyan améis a quien améis, la sociedad está preparada, los empresarios están dispuestos, los toreros os apoyan.
¿Qué puede salir mal? Y ahora coge el toro por los cuernos y brinda el siguiente por tú libertad por la diversidad y por la igualdad.
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