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CRAIG PEARCE CREA UNA ORGÍA VISUAL PUNK CON 'WILL'

¿Qué demonios has hecho con Shakespeare, Will?

Lo avisaban en el tráiler y era de esperar teniendo en cuenta que la mente creadora detrás de ‘Will’ es la de Craig Pearce, guionista de locuras audiovisuales como ‘Romeo y Julieta’, ‘Moulin Rouge’ y ‘El gran Gatsby’. Y eso es la nueva serie de TNT, una orgía visual punk en medio de la cual colocan a un joven Shakespeare con ganas de comerse el mundo.

-¿Qué demonios han hecho con William Shakespeare?

¿Qué demonios han hecho con William Shakespeare?TNT

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Aún así, pese al aviso y pese a lo esperado del resultado, cuesta ver al dramaturgo más aplaudido, venerado y adaptado de la historia en la tesitura en la que le colocan en ‘Will’. Da igual que se sea un erudito de su biografía –complicado por otra parte dada la falta de información– o un auténtico ignorante de la misma, la explosión de colores y música punk desborda sin llegar, eso sí, a descarrilar del todo.

El William Shakespeare (Laurie Davidson) que presenta esta serie es un joven casado con tres hijos que un buen día planta a su familia y se va en busca de fama y fortuna como escritor a Londres. Atrás deja un pasado que según él asfixia su talento entre acusaciones de egoísmo e irresponsabilidad. Cuando llega a la capital británica se encuentra, no sin sorpresa (en eso coincide con el espectador), que no se trata de la ciudad sucia, gris y fría que podría imaginar.

Sucia está. Frío también hace. Pero de gris tiene poco. El colorido de la escena del mercado no es lo que cabría esperar de la Londres del siglo XVI en la que se ambienta la serie. Pero es marca de la casa y hay que cumplir con la cuota de colorido y locura desatada. Así era aquella versión de ‘Romeo y Julieta’ de los noventa en la que Leonardo DiCaprio y Claire Danes se enamoraban a través de una pecera y así es este biopic extraño que zozobra del punk más gamberro al drama más intimista según sople el viento.

‘Will’ tiene cosas interesantes, bien contadas y que dan una imagen del talento, el ego y la vida del autor de la historia de amor más adaptada. Laurie Davidson es el encargado para meterse en la complicada piel de un Shakespeare algo atolondrado, romántico y traumatizado por un hecho de su pasado al que le falta la picardía de algunos de sus personajes literarios. Nada más llegar a Londres se deja liar por un pillastre que le roba la bolsa del dinero. Nadie lo habría dicho de un genio como Shakespeare. Pero, claro, estar en las nubes es lo que tiene. Y tener la cabeza llena de pájaros, pues también.

Serie "Will"
Serie "Will" | TNT

El hecho de que en realidad la vida de Shakespeare sea todo un misterio con más fábulas y leyendas urbanas que hechos comprobados alienta la fantasía de una serie que no se toma a sí misma demasiado en serio. Tan pronto da una pincelada sobre el drama interno del protagonista que vio como su tío era ejecutado por católico como salta a un número punk que rompe con el tono trágico de lo que está contando de manera radical. Como si quisiese hacer notar al espectador la importancia y crudeza del momento histórico que atraviesa Londres –hay escenas especialmente violentas y desagradables– pero sin entrar mucho en ello.

Es como si ‘Will’ fuese dos series en una y no terminase de decantarse por un lado u otro. A ratos es un drama con un joven que busca su sitio en el complicado mundo de las escena londinense al tiempo que es perseguido por católico y que conoce a una atractiva chica que le hace dudar de su matrimonio. Y a ratos es un biopic libre muy gamberro en el que la estética punk lo invade todo con una banda sonora que hace que una representación teatral parezca más un concierto de los setenta que otra cosa. Y de una a otra Shakespeare va dando tumbos. Al menos, en el piloto estrenado ayer en España.

Al final la pregunta que surge viendo el primer episodio es ¿qué demonios han hecho con Shakespeare y por qué? Que habría sido mejor apostar por el punk o por el drama vital, pero no dar bandazos de uno a otro. Se titula Will, pero que nadie pretenda ver un biopic –tampoco es que fuese la intención de sus creadores–, porque lo que se encontrará es la historia de un joven en busca de fama contada con una estética y una banda sonora muy punk. Eso y una historia de amor imposible entre el chico nuevo en la ciudad de ojos azules y la hija del director de la compañía de teatro en la que entra a trabajar.

Y el resultado recuerda, en cierta manera, a aquel biopic igualmente libre que fue Da Vinci’s Demons. Eso sí, aquella aventura duró tres temporadas y Will, que fue emitida en julio en Estados Unidos, ya está cancelada. Así que solo se verán los 10 episodios que componen la primera que acaba de estrenar TNT en España.

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