Twitter enloquece con un vídeo que tiene hipnotizado a medio mundo

¿Pero esto no iba para TikTok? Como si no tuviéramos suficiente con el contenido infinito de la red social de moda, ahora resulta que Twitter pretende robarle protagonismo. Bueno, por muy poquito y porque alguien se lo ha propuesto muy fuerte.

El susodicho se llama Kevin Parry pero se autodenomina ‘Video Wizard’, es decir, que le cambias la varita por una cámara y te hace cosas maravillosas. De existir un Colegio Hogwarts para editores, él entraba el primero y sin cicatriz de por medio.

El Harry Potter de los vídeos tiene análogos españoles. Sin ir más lejos, Michenlo es de los que también hacen verdaderas peripecias con un smartphone y mucha maña. Eso sí, por el momento, el ex de la Riumbau es incapaz de igualar las habilidades del gran mago Perry.

Su última diablura ha consistido en publicar en Twitter un pequeñísimo compendio con sus creaciones más locas en las que se convierte en objetos muy random. En nieve, en un plátano e incluso en puro fuego.

La cosa ha triunfado muchísimo y el pequeño clip de apenas treinta segundos ya suma más de un millón de likes y 220.000 retweets. Ni Ibai anunciando que se casa en una boda ‘de locos’ lograría semejantes cifras.

El canadiense está acostumbrado a sorprender pero jamás una obra suya había logrado tal repercusión. Es imposible ver la mini-producción una sola vez y estamos seguros que de ahí viene tanto like. Es de esas cosas que enganchan y necesitas guardar para ver en bucle.

Como buen truco de magia, la gracia está en que jamás conozcamos cómo ha conseguido Kevin la hazaña que nos trae de cabeza –aunque él comparte sus secretos sin problema– . No solo a nosotros nos ha molado, también empieza a sonar fuerte por Instagram, que si bien no lo ha petado tantísimo como en Twitter, también ha flipado a propios y extraños.

Ayer mismo el tuitero estaba agradeciendo las 10 millones de visualizaciones y un suspiro después, ya roza los 15. Tela, y la cosa acaba de comenzar. Promete ser de esos posts que pasan a la historia, como el selfie que compartieron las superestrellas más enormes de Hollywood durante los Oscar de 2014.