¿ESTOY DORMIDO?
¿Qué son los sueños lúcidos? Cómo ser consciente de que estás soñando
Los sueños lúcidos son una experiencia realmente fascinante, motivo por el que no es de extrañar que tantas personas intenten utilizar técnicas que les permitan llegar a controlar los sueños y explorar este mundo de fantasía que ha creado su mente.
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Cuando uno sueña que se encuentra en un lugar idílico o vive una historia que desearía que fuera real, a la mayoría de las personas les gustaría poder pasar algo más de tiempo dentro de esta fantasía antes de despertarse. Pero, aunque haber disfrutado de este momento ya es suficiente para muchos, hay quienes no solo tienen la suerte de poder experimentar esta fantasía, sino que también consiguen tomar el control de esta historia. Esto es lo que se conoce como un sueño lúcido, es decir, un sueño en el que la persona consigue tener cierto control sobre lo que está sucediendo dentro de la historia que ha creado su mente.
La mayoría de los que han oído hablar sobre estos sueños, han sentido el deseo de poder experimentar esto alguna vez, ya que el poder explorar por este mundo de fantasía resulta especialmente emocionante para muchos. Pero, pese a que uno puede pensar que conseguir que esto ocurra es casi imposible, la realidad es que existen algunos trucos que las personas pueden intentar para llegar a tener sueños lúcidos.
Entre estos, se encuentra la técnica de realizar pruebas de realidad, algo que uno debe acostumbrarse a hacer en su vida cuotidiana, de forma que en el futuro pueda salirle de forma natural dentro del sueño. Un ejemplo de esto sería mirar el reloj para ver si avanza la hora o no, y fijarse en si cambia de una forma irreal. Por otro lado, otra opción sería tener un diario de sueños para hacer un seguimiento de estos, de forma que pueda buscar un patrón en sus sueños para que después le sea más fácil identificar cuándo está durmiendo y cuándo no.
Aunque hay varias técnicas para intentar conseguir tener un sueño lúcido, tristemente no todo el mundo tiene la suerte de conseguirlo. Pero, aun así, nunca se sabe si, con el tiempo, uno puede llegar a tener la oportunidad de disfrutar de uno, por lo que vale la pena intentarlo.
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