VISTO EN INSTAGRAM
El cambio radical de una chica con sobrepeso a la que su marido engañaba mientras intentaban tener un hijo
Una dolorosa ruptura fruto de un engaño fue la determinación que tuvo Kristen para dar un cambio radical a su vida y onvertirse en profesora de fitness.
Publicidad
Hay momentos cruciales en la vida que suponen un motor de cambio. Son trascendentales para tomar una decisión y cambiar el rumbo en el que estás.
Esto es precisamente lo que le sucedió a Kristen Aisbett, una mujer australiana que pasó por un duro trance hasta encontrar el camino a la felicidad.
Su viaje empezó cuando tenía 26 años, Kristen era una mujer con sobrepeso que mantenía una relación tóxica y posesiva con su novio.
Tras descubrir que éste le engañaba decidió cortar la relación en seco, lo que le provocó una fuerte depresión añadido a los problemas de ansiedad con la comida que ya sufría.
"Nunca me di cuenta de cuánto peso había ganado, lo infeliz que era como persona y cuán dependiente me había vuelto de la única persona con la que pensé que pasaría el resto de mi vida", relata en una entrevista a Love What Matters.
El médico le recetó la primera pastilla antidepresiva y fue entonces cuando Kristen se dio cuenta de que debía tomar otro camino para salir de ese infierno.
Explica que desde ese momento empezó a centrarse en ella y solo en ella. En su crecimiento personal y su propio bienestar emocional.
Contrató a un entrenador personal para adelgazar y poco a poco fue encontrándose cada vez mejor física y mentalmente. Recuperó la amistad con viejos amigos que había perdido, la relación con su familia y las ganas por estar en el mundo. En tan solo 20 semanas adelgazó cerca de 15 kilos.
Ahora se encuentra más feliz que nunca y el destino ha querido que acabe dedicándose al deporte como entrenadora personal. Además, se presenta a concursos de culturismo en los cuales ha cobijado varios éxitos.
"Hoy soy la más feliz del mundo. Tengo los mejores amigos y familiares que he tenido en mi vida, los cuales realmente me apoyan y aman por lo que soy", concluye.
VER MÁS: El abrazo más bonito
Publicidad