UNA LÁSTIMA
El fenómeno de la 'cara Ozempic': el precio estético de la pérdida de peso rápida
El concepto de 'cara Ozempic' se ha extendido después de que el uso del medicamento se haya extendido entre varios rostros conocidos. Hoy, vamos a explicar en qué consiste este concepto que cada vez coge más fuerza.

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El Ozempic, cuyo principio activo es la semaglutida, fue aprobado originalmente para el control de la glucemia en pacientes con diabetes tipo 2. Sin embargo, su capacidad para suprimir el apetito y promover la pérdida de peso ha llevado a su uso fuera de indicación médica, especialmente entre celebridades y personas influyentes en redes sociales. Esta tendencia ha generado una alta demanda del medicamento, provocando escasez y dificultando su acceso para quienes realmente lo necesitan por razones médicas.
La 'cara Ozempic' se refiere a los cambios faciales que ocurren tras una pérdida de peso rápida y significativa. Estos cambios incluyen mejillas hundidas, piel flácida y una apariencia general de envejecimiento prematuro. La rápida reducción de grasa subcutánea en el rostro puede provocar una pérdida de volumen que la piel, especialmente en personas mayores, no puede compensar adecuadamente, resultando en una apariencia más envejecida.
Según especialistas, la pérdida de peso acelerada puede conducir a una disminución de la elasticidad de la piel, lo que contribuye a la flacidez y a la aparición de arrugas. Este efecto no es exclusivo de Ozempic; cualquier método que induzca una pérdida de peso rápida puede provocar consecuencias similares en la apariencia facial.
Para mitigar estos efectos, los expertos recomiendan una pérdida de peso gradual y supervisada médicamente. Además, existen tratamientos estéticos que pueden ayudar a restaurar el volumen facial perdido, como los rellenos dérmicos o los injertos de grasa autóloga. Sin embargo, estos procedimientos suelen ser costosos y no están exentos de riesgos.
Es crucial que quienes consideren el uso de Ozempic para la pérdida de peso consulten a profesionales de la salud y sean conscientes de los posibles efectos secundarios, tanto estéticos como de salud en general. La búsqueda de soluciones rápidas puede conllevar consecuencias no deseadas que afectan la calidad de vida y la percepción personal.
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